

Primera consulta
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Después de confirmar tu primera consulta, recibirás un cuestionario que contiene información esencial para comprender más profundamente tu situación. Junto con esto, te proporcionaré un diario de alimentos de cuatro días. Ambos documentos deben completarse y devolverse unos días antes de nuestra cita en línea.
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La consulta tendrá una duración de 90 minutos. En este tiempo, exploraremos con mayor detalle tu historial médico, hábitos alimenticios, niveles de estrés, rutinas diarias y estado emocional, entre otros aspectos.
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Basándome en esta evaluación inicial, elaboraré un Plan Nutricional que abarque no solo el aspecto alimentario, sino también un enfoque de estilo de vida diseñado específicamente para ajustarse a tus necesidades físicas y emocionales.
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Comprende que adaptarse a un nuevo patrón de alimentación y hábitos cotidianos puede sentirse abrumador. No existen atajos ni soluciones mágicas, ya que los cambios significativos requieren dedicación y perseverancia. Por esta razón, te brindaré apoyo durante un período de 4 semanas a través de WhatsApp. Mi objetivo es ayudarte a implementar cambios realistas y positivos sin generar expectativas poco realistas.
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Una vez que concluya este período, acordaremos una fecha para una primera sesión de seguimiento. En esta instancia, evaluaremos los cambios que hayas experimentado y, si es necesario, ajustaremos la dieta u otros aspectos de manera conjunta.
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El primer seguimiento está incluido en la primera consulta.
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Sesiones de seguimiento
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​Los seguimientos posteriores a la primera consulta de nutrición son vitales para valorar el avance y efectuar ajustes con base en las respuestas del cuerpo y las necesidades cambiantes. Esta fase implica una revisión y adaptación constante del plan alimentario, asegurando la consecución de los resultados deseados y brindando apoyo hacia una alimentación más saludable y equilibrada.
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La duración de la primera sesión se estima en aproximadamente 45 minutos.
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Durante estos seguimientos, se realizarán las siguientes acciones:
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Revisión y ajuste de objetivos: Se verificará si los objetivos y recomendaciones nutricionales han sido cumplidos y se realizarán las modificaciones necesarias.
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Evaluación del progreso: Se examinarán los cambios ocurridos desde la primera consulta, como alteraciones en el peso, niveles de energía y vitalidad, así como mejoras en los objetivos específicos establecidos.
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Análisis de la dieta actual: Se volverá a evaluar la dieta actual en comparación con las recomendaciones iniciales. Esto permitirá identificar áreas en las que se sigue la orientación nutricional y detectar aquellas que requieren ajustes.
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Ajustes en el Plan Nutricional: Basándose en los resultados obtenidos, se ajustará el Plan Nutricional con recomendaciones adicionales para potenciar su eficacia.
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Resolución de desafíos: Cualquier problema o dificultad experimentada en la implementación de los cambios dietéticos será abordado para hallar soluciones prácticas.
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Evaluación de mejoras en la salud: Se evaluará si ha habido mejoras en síntomas o marcadores de salud relevantes.
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Establecimiento de nuevos objetivos: En caso de haber alcanzado los objetivos iniciales, se establecerán nuevas metas para continuar avanzando en la mejora de la salud y el bienestar.
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Seguimientos regulares: Dependiendo de la situación individual y los objetivos a largo plazo, se programarán seguimientos periódicos para monitorear continuamente el progreso y realizar ajustes en la dieta según sea necesario.
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